Por João Teles Barbosa.
Está en la naturaleza del Hombre organizar su espacio, creando formas que funcionen como su extensión, de lo inmensurable a lo mensurable. Estas “formas” o acciones son condicionadas por la circunstancia e igualmente crean circunstancia, donde la historia y la memoria desempeñan un papel esencial.
Como dice Walter Gropius, “los arquitectos responsables piensan mucho en términos de toda la comunidad”. El arquitecto es un organizador del espacio, un artesano, que manteniendo relaciones con su entorno (social, físico, económico e histórico), y a través de una visión amplia, crea nuevas circunstancias que intentan encontrar su armonía en el conjunto urbano y ser benéficas para el hombre y la sociedad en que se encuentre.