Por Nestor Quiroz.

La protesta, que desde mi punto de vista es muy creativa, causó molestia en las autoridades y los manifestantes fueron detenidos y llevados ante una juez quien después de analizar el caso determinó que no cometían delito alguno y fueron puestos en libertad.

Lo que me pareció interesante de este suceso es que destaca un elemento de la ciudad con el que luchamos todos los días no solo en la calles de México, sino en muchas calles y carreteras del mundo y que tomamos por sentado porque ya nos acostumbramos a su constante presencia.

Investigando me di cuenta que los baches son un elemento que participa activamente en la vida de nuestras ciudades tanto positiva como negativamente. Quitando sus infinitos inconvenientes, con los cuales ya estamos muy familiarizados y sin quitar la respectiva culpa a los responsables de la calidad de la pavimentación, en su lado positivo encontramos que los baches también resultan ser generadores de empleos y tienen una importante participación en la activación de la economía global.

La industria de pavimentación con asfalto es de gran importancia a nivel mundial ya que juega un rol vital en el desarrollo de infraestructura para la comunicación y comercio de los países. Por ejemplo, según datos de la EAPA (European Asphalt Pavement Association) y la NAPA USA (National Asphalt Pavement Asscociation), la inversión pública para la construcción de carreteras, calles y puentes es de €80 mil millones de euros al año en Europa y de $55 mil millones de dólares al año en Estados Unidos.

La magnitud de estas cifras nos muestra la cantidad de dinero que se mueve en la industria de la pavimentación asfáltica, especialmente en Europa y Norte América, que son las regiones en el mundo con el mayor número de vías pavimentadas. Según datos de la NAPA, Estados Unidos cuenta con 4 millones de km de vías asfaltadas, mientras que Canadá cuenta con 415,000 km y México con 178,000 km.

El porcentaje de vías pavimentadas con asfalto en comparación con las carreteras de concreto hidráulico es muy superior, siendo alrededor del 90% de asfalto contra menos del 10% de concreto. Y es que aunque en muchos casos el pavimento de concreto hidráulico sea el más resistente y adecuado, los costos para su reparación son más elevados y la mayoría de los países, especialmente los que están en vías de desarrollo, prefieren seguir utilizando el asfalto.

Estar dentro de las regiones con más caminos pavimentados en el mundo también implica que nuestra producción de asfalto es alta. México cuenta con aproximadamente 400 plantas de producción de asfalto, que es un número considerable si lo comparamos con las 60 plantas con las que cuenta Sudáfrica o las 45 de Nueva Zelanda, aunque nos queda mucho por recorrer si lo comparamos con las 6,500 plantas con las que cuenta China, o las 4,000 de Estados Unidos o Europa.

La industria del asfalto, tan solo en Estados Unidos y Europa emplea a alrededor de 400,000 de personas, las cuales trabajan en la producción, transporte y colocación de este material.

En conclusión, no pretendo decir que los baches son un elemento positivo de nuestras ciudades y que debamos estar agradecidos por tenerlos, sin embargo al hacer esta reflexión se puede entender por qué la mayoría de nuestras ciudades en el mundo siguen usando el asfalto para cubrir sus caminos y las razones económicas pesan mucho a la hora de que los gobiernos optan por aprobar un presupuesto destinado a la pavimentación de sus redes de caminos y puentes.

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